CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Para los familiares de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos hace más de tres años, “los ataques en Iguala resultaron traumáticos por su carácter violento, inesperado, abrupto y sin sentido”, en tanto, sobreviven con la sensación de que “el tiempo se ha detenido”, mientras viven “un intenso sufrimiento emocional” con “la necesidad de justicia como posibilidad de dar sentido a los hechos”.
Lo anterior forma parte de las conclusiones del informe “Yo sólo quería que amaneciera. Impactos psicosociales a las familias de Ayotzinapa”, que se presenta este miércoles 14 en el Centro Cultural Tlatelolco.
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