CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El asesinato de la activista tamaulipeca Miriam Elizabeth Rodríguez Martínez mostró una vez más la negligencia e incapacidad de las autoridades mexicanas para proteger a los defensores de derechos humanos y a las víctimas en el país, señalaron Amnistía Internacional (AI) y la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ONU-DH).
En dos comunicados por separado, las organizaciones expresaron su condena contra el asesinato de Rodríguez, quien creó el Colectivo de Personas Desaparecidas de San Fernando, Tamaulipas, después de la desaparición y el asesinato de su hija Karen, en 2012. La mujer había sido amenazada en muchas ocasiones, y frustró una tentativa de secuestro de su esposo.
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