CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Al escándalo causado por la práctica de dobles contratos en el futbol mexicano, para darle la vuelta a los impuestos, debe sumarse el caso que obliga al equipo Tiburones Rojos de Veracruz a pagar una indemnización de 33 millones de pesos en favor de uno de sus exdirectivos.
El 13 de agosto de 2014, el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) emitió una sentencia sobre la demanda interpuesta por Gustavo Parente contra el conjunto escualo por incumplimiento de contrato.
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