GINEBRA (apro).- Ante la propagación del coronavirus en cárceles, hospicios y hospitales psiquiátricos, Michelle Bachelet, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, pidió a los gobiernos que tomen medidas urgentes para proteger la salud y la seguridad de las personas que se encuentran detenidas y recluidas.
“El COVID-19 ha empezado a propagarse en las prisiones, las cárceles y los centros de detención de migrantes, así como en hospicios y hospitales psiquiátricos, y existe el riesgo de que arrase con las personas recluidas en esas instituciones, que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad”, declaró Bachelet.
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