MONTERREY, N. L. (apro).- El documentalista Silverio Gama siente que su mayor fracaso es su éxito. En permanente estado reflexivo, se deja ser reconocido por sus compañeros periodistas de México. Algunos le reclaman, entre bromas, que necesitara emigrar a Estados Unidos, donde reside, para encontrar la fama. Otros, en serio, lo acusan de pretencioso y de entregar una imagen deformada del país.
En Bardo o Falsa crónica de unas cuántas verdades (Bardo, false chronicle of a handful of truhts, 2022), el director Alejandro González Iñárritu se replica, convirtiendo en su avatar a Gama (Daniel Giménez Cacho), en un ejercicio de autoficción, similar al que hizo Pedro Almodóvar con Antonio Banderas en Dolor y Gloria.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí